Redondo

Share this post

De nuevo por aquí para hablar de un clásico de la liga, no me quedo corto si afirmo que el argentino es uno de los mejores mediocentros que el fútbol haya conocido, Fernando Carlos Redondo.

Redondo comenzó su carrera profesional en Argentinos Juniors, donde permanecería 5 temporadas antes de cruzar el charco para llegar a la Liga Española, recalando en el Club Deportivo Tenerife a los 21 años de edad para hacerse un nombre en el campeonato en un club modesto, pero que poco a poco estaba armando un equipo competitivo. Sus mejores momentos en Tenerife llegaron entre los años 92 y 94. En pocos años, el Tenerife había pasado de luchar por mantenerse en la categoría a luchar por los puestos europeos, no es de extrañar si nos atenemos a los jugadores que había en aquellas plantillas, tales como el propio Redondo, Chemo Del Solar, Ezequiel Castillo, Pier, Pizzi, Dertycia, Diego Latorre o César Gómez.

Con la llegada al banquillo del también argentino Jorge Valdano, Redondo vive su primera experiencia en competición europea gracias al quinto puesto obtenido en Liga que le daba el billete al Tenerife para jugar la Copa de la UEFA en la siguiente temporada. Auxerre y Olympiakos sucumbieron antes de llegar a dieciseisavos para después caer eliminados por la Juventus de Turín.

En el verano de 1994 todo cambia para Redondo, El entrenador Jorge Valdano es contratado para dirigir al Real Madrid y la primera petición que hace es la de conseguir el fichaje del medio argentino. Dicho y hecho, Fernando Redondo, en plenitud deportiva y erigido como un gran líder, se convierte en jugador del Real Madrid el día 6 de junio de 1994 (el día que cumplía 25 años).

Su aventura en Madrid no comenzó de la mejor manera posible ya que se lesionó de gravedad en pretemporada jugando el torneo Euskadi en San Mamés por una entrada de Mendiguren. El ambiente estaba caldeado y venía de lejos, la temporada pasada aun en las filas del Tenerife, Redondo hizo una entrada a la estrella del equipo bilbaíno Julen Guerrero y desde entonces los aficionados estaban encima de Redondo. Ese clímax de excitación se contagió al terreno de juego y en la segunda mitad del encuentro Mendiguren caza a Redondo provocándole una rotura parcial del ligamento interno de la rodilla izquierda. Resumen del altercado, dos meses de baja para el medio sin ni siquiera haber comenzado la temporada.

Pero los infortunios de esa primera temporada no terminarían ahí para Redondo, en diciembre, el Real Madrid y Redondo juegan en el Santiago Bernabéu el partido correspondiente a la jornada 14 de Liga frente al Real Oviedo y, en las postrimerías del encuentro, con marcador favorable al Real Madrid 2-0 (goles de Raúl y Laudrup), Slavisa Jokanovic caza a Redondo en la rodilla, esta vez la derecha, para dejarle fuera de combate por otros 2 meses. Mucha polvareda levantó ese lance, con jugadores ovetenses acusando a Redondo de haber provocado a Jokanovic, pero cuando le preguntaron a Redondo por tales afirmaciones, no quiso responder y aceptó la entrada como cosas del fútbol. Esos eran sus valores, lo que sucede en el campo, se queda en el campo. Aún con sus 4 meses totales de baja esa primera temporada, se proclamaría campeón de Liga.

Lesión de Redondo por la entrada de Jokanovic. Fuente: Youtube.

La temporada siguiente tampoco fue muy buena para Redondo en el plano personal ni para el Real Madrid en el plano colectivo, obteniendo el sexto puesto en la clasificación y quedándose fuera de puestos europeos.

Eso no podía quedar así, y en el año 1997 el Real Madrid sufre una transformación que le llevaría a dominar Europa durante unos años. Llega Fabio Capello al banquillo esa temporada 1996-1997 y Redondo, ya a pleno rendimiento, es pieza clave en la consecución del título de Liga. Nueva temporada, la 1997-1998 con nuevo entrenador, a pesar de haber conquistado la Liga, Fabio Capello abandona el barco y llega, desde Tenerife —como Valdano y Redondo unos años antes— Jupp Heynckes. Esa temporada el equipo sufre una metamorfosis de difícil explicación, en la Liga los resultados no llegan, pero en Europa, el equipo se transforma y llegan hasta la gran final donde doblegarían a la Juventus y conseguirían la ansiada «Séptima», lo que les valió el billete para jugar en Tokyo la final de la Copa Intercontinental frente al Vasco da Gama. Redondo añadía así la Copa Intercontinental a su currículum al ganar por 2-1 en la famosa final del aguanís de Raúl.

Dos años después, en el año 2000, Redondo era considerado una estrella mundial y para siempre quedará en nuestras retinas el archifamoso «taconazo de Old Trafford». En cuartos de final de la Champions al Real Madrid le tocaría enfrentarse al actual campeón, el Manchester United. 0-0 en el Bernabéu y tocaba visitar el teatro de los sueños de Old Trafford donde el mundo asistiría a la jugada icónica de Redondo. Arrancó por la izquierda para desprenderse casi en el córner del defensor mancuniano Berg con un regate de tacón sublime consiguiendo bajar hasta el área y, ahí, levantando la cabeza como si todo eso que estaba sucediendo fuera a cámara lenta, puso el balón en boca de gol para que Raúl solo tuviera que empujarlo a la red. El Real Madrid ganó el partido y la eliminatoria 2-3 y al final del encuentro hasta el entrenador del Manchester United, Sir Alex Ferguson, dijo estas palabras:

«Redondo fue el jugador clave aquella noche, todos los balones le caían a él y no perdía ni uno, parecía que tenía un imán»

Taconazo de leyenda en Old Trafford. Fuente: Youtube.

El Real Madrid y Redondo llegarían a la final frente al Valencia y ganaría la Octava Champions y segunda en el currículum de Fernando, además, sería nombrado jugador más valioso del torneo por la UEFA. Pero en este final de temporada apoteósico nadie podía esperar lo que iba acontecer después. Con 2 Champions League en 3 tres años, Lorenzo Sanz convoca elecciones a la presidencia en la creencia de que con esos datos ganaría la reelección fácilmente, pero a veces, dos más dos no suman cuatro, y por sorpresa, Florentino Pérez ganó las elecciones y una de sus primeras decisiones fue la de traspasar a Fernando Redondo al Milan.

Esta noticia cayó como una bomba entre los aficionados merengues, que idolatraban (e idolatran aun) al jugador argentino, tanto es así, que el día que estaban reunidas las partes en el Santiago Bernabéu cerrando el acuerdo, hubo hasta manifestaciones en contra de esa venta al grito de «Figo no, Redondo sí». El aficionado no podía entender cómo iban a dejar escapar al genio de Buenos Aires, pero así fue, el 27 de julio del año 2000 el Real Madrid emite un feo  comunicado donde confirma la venta por 3.000 millones de las antiguas pesetas de Fernando Redondo al Milan acusándole de ser él quien quería ese traspaso. Por su parte, Redondo convoca a la prensa para dar su versión de los hechos.

«Estoy muy bajo. Estoy muy bajo. Han querido ensuciar mi nombre. Voy a contar la verdad»

Sea como fuere, un triste final de relación con acusaciones en ambas direcciones sobre quién tuvo culpa en ese traspaso que terminó con uno de los jugadores más icónicos que haya tenido el Real Madrid en el Milan de Berlusconi.

Mucha gente se esforzó en vender la idea de que vender a un jugador de 31 años por 3.000 millones de pesetas era un buen negocio y más, cuando vieron lo que le aconteció al jugador nada más llegar a Milán. Un auténtico calvario de lesiones supuso que no pudiera jugar ni un solo encuentro en sus dos primeras temporadas, pero es precisamente en los peores momentos donde más se ve la grandeza de una persona y, dolido por no poder jugar y demostrar su talento, decidió no cobrar hasta que se recuperara. Años más tarde, Redondo hacía público el calvario sufrido en esos años:

«Me metían en el quirófano, me ponían la pierna hacia arriba, me la vaciaban de sangre con un torniquete y me pasaban fármacos».

«El riesgo era que si algo de eso se iba al corazón, podía tener un problema. Te dejaban hacerlo seis veces como máximo y yo hice cinco y de ese modo pude superar el umbral del dolor y trabajar en la rehabilitación»

Reaparecería en la temporada 2002-2003, y aunque no pudo disputar nada más que 19 partidos entre Liga, Copa y Champions, el destino siempre caprichoso, quiso que Redondo pudiera volver a su casa, al Santiago Bernabéu, y despedirse como se merecía de su afición en un campo abarrotado con 76.000 personas ovacionando y jaleando a El Príncipe cada vez que éste tocaba el balón.

Regreso de Redondo al Santiago Bernabéu. Fuente: Youtube.

Una temporada más en Milán con otros apenas 14 partidos en total hicieron que Redondo tomase la decisión de retirarse del fútbol en el año 2004 con un bagaje de 2 Ligas, 1 Supercopa, 2 Champions League y 1 Copa Intercontinental como sus mayores logros en el Real Madrid, y con 1 Scudetto, 1 Coppa, 1 Supercoppa, 1 Champions y 1 Supercopa de Europa con el Milan, aunque dadas sus pocas apariciones en el conjunto lombardo, estos títulos pueden ser un tanto residuales.

También me gustaría señalar el sorprendente poco protagonismo que tuvo en la selección argentina, con solo 29 apariciones. A pesar de ser declarado el mejor jugador de la Copa Confederaciones del 92 que ganó con Argentina, de ganar la Copa América del 93 y participar en el Mundial de E.E.U.U 94, sus rencillas con el que sería después seleccionador argentino, Daniel Passarella, privaron a la albiceleste de disfrutar más de un jugadorazo de su talla.

Fernando Carlos Redondo, un medio capaz de sostener él solo al equipo, un titán al que nadie podía robar un balón, con una elegancia en el toque y en las conducciones de balón inusuales. Un jugador de leyenda.

Fotografía: Scoopnest.com
Redondo

¡Suscríbete ahora!

Recibe nuestro boletín de noticias y entérate de las nuevas publicaciones.

¡No enviamos spam! Lee nuestra política de privacidad para más información.


Share this post

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll hacia arriba